Menú

Meike Speedlight MK900

4.5

Meike Speedlight MK900

Review

Al igual que Meike tiene un modelo específico para usuarios de Canon, el MK580, la marca también cuenta con la unidad analizada en esta reseña, exclusiva para Nikon, que calca la apariencia del SB-900.

El número de guía del MK900 es de 58, a un ISO 100 y una focal de 180 mm, por lo que estamos ante un flash muy potente. Por otra parte, su cabezal presenta un completo giro, merced a una rotación de -7 a 90 grados en vertical y de 360 grados en horizontal. Asimismo, la antorcha integra un zoom motorizado, que cubre una interesante focal de 18 a 180 mm, ampliable a 14 mm con el uso del panel reflector extraíble.

La intensidad de la iluminación puede establecerse en manual, a partir de un intervalo de 1/1 a 1/128, más una fina precisión en tercios de potencia. Igualmente, funciona correctamente con el modo i-TTL de Nikon, permitiendo compensar el destello desde +3 a -3 EV, con incrementos de un tercio. Por otro lado, nos da soporte para la fotografía estroboscópica con su opción RPT, conocida en otras marcas como multi.

El dispositivo se comunica inalámbricamente, como maestro y esclavo. Su sistema óptico alcanza una distancia de 12 a 15 metros en interiores y de 8 a 10, en exteriores. Abarca un total de 4 canales y 3 grupos (A, B y C), con la posibilidad de añadir valores distintos en cada uno de ellos.

Como indicaba al principio, su diseño es idéntico al del Nikon SB-900, mimetizando la disposición de los controles de este modelo. Tiene una holgada pantalla LCD, retroiluminada en azul, que nos da abundante información, con datos extras como el nivel de carga o la temperatura.

Pantalla del Meike MK900

La calidad de la construcción es realmente buena en relación al coste, con remates bien pulidos como su zapata metálica -con palanca para el bloqueo-, o el ensamblaje de la puerta del compartimento de las pilas, que es el punto débil de no pocas unidades. También incluye puerto para PC Sync y entrada para conectar una fuente de alimentación externa, protegida por una tapa que tenemos que separar del aparato al emplear la batería. Personalmente, este detalle no me gusta; prefiero que las tapas siempre queden unidas al flash -como sucede con la correspondiente al PC Sync-, evitándonos el riesgo de pérdidas.

Un aspecto muy logrado de este Meike, es su velocidad de reciclaje. El lapso de carga es de 3 segundos, después de emitir un disparo a la máxima potencia, con pilas alcalinas. Lo normal es que, salvo casos puntuales, nos movamos en intensidades medias y ahí el tiempo se reduce considerablemente. Además, podemos optimizarlo con recargables o con una batería.

Adicionalmente, suministra luz de modelado, ayuda al autoenfoque, bloqueo FV, avisos sonoros, ahorro de energía, protección térmica y ajustes personalizados. Asimismo, sincroniza con la cortina delantera y la trasera, pero se echa en falta la incorporación de HSS, sobre todo a la vista del resto de características.

Viene acompañado en la caja por una funda protectora, un pie para utilizarlo como esclavo y un manual. Las instrucciones, como ocurre habitualmente con los fabricantes chinos, no están en español, sólo en inglés y chino.

Compartimento de las pilas del Meike MK900

Características

  • Dimensiones: 5,8 x 20,0 x 7,8 cm.
  • Peso: 395 g.
  • Número de guía: 58.
  • Modos: manual, TTL y multi.
  • Maestro: sí.
  • Esclavo: sí.
  • Cabezal giratorio: vertical (90°) y horizontal (360°).
  • Cabezal zoom: 18-180 mm.
  • Tiempo de reciclado: 3 segundos, con cuatro pilas alcalinas AA.
  • Sincronización a alta velocidad: no.

Compatibilidades

Es compatible con las cámaras DSLR de Nikon.

Opinión final

4,5 estrellas

En su línea de ofrecer buenos productos, a bajo precio, Meike comercializa este interesante flash para usuarios de Nikon. Representa una buena alternativa para aficionados exigentes, siempre que la sincronización a alta velocidad no sea un requisito indispensable.

Entre sus ventajas, hay que destacar su gran alcance y las prestaciones de su cabezal, tanto para el aprovechamiento de la luz -con su zoom de amplio rango-, como por sus posibilidades de suavizado del destello -mediante el giro de la antorcha-. Otros puntos fuertes están en su variedad de modos de configuración y en su satisfactorio tiempo de reciclado.