Menú

Canon EF-S 35mm f/2.8 Macro IS STM

4.5

Canon EF-S 35mm f/2.8 Macro IS STM

Nuestra valoración
Nota: 4,5 / 5
Ventajas
  • Luminosidad.
  • Estabilizador de imagen.
  • Funcionalidades macro e iluminación anular.
  • Peso y compacidad.
Desventajas
  • Anillo de enfoque.

Review

1. Introducción

El Canon EF-S 35mm f/2.8 Macro está dedicado a cámaras con sensores APS-C. Tiene un precio razonable para las prestaciones que ofrece y, más aún, tratándose de un producto de primera marca. Es un objetivo muy útil para fotografía de naturaleza, en entornos urbanos y para retratos. Destaca por su versatilidad, porque, como indican sus siglas, también tiene cualidades macro y permite fotografiar pequeños objetos.

2. Distancia focal

Sus 35 mm son el equivalente a una distancia de 56 mm en una cámara de formato completo. Constituye una focal, por tanto, bastante aproximada a la de un 50 mm para full frame, que depara un ángulo de visión muy natural. En este tipo de lente no tienes zoom, pero sí la calidad que siempre te da una óptica fija. Supone un complemento ideal para unidades todoterreno.

3. Diafragma y estabilizador de imagen

El dispositivo cuenta con un estabilizador de imagen IS híbrido, una tecnología muy útil para macrofotografía, que aquí brinda 4 pasos de estabilización. Si a este sistema le sumas una apertura máxima de f/2.8, el resultado es una luminosidad que viene muy bien en sitios donde escasea la luz, ya sea en interiores o en tomas en la hora azul e, incluso, por la noche.

El diafragma es de apertura circular y consta de 7 láminas, las mismas que su equivalente de 35 mm en Nikon. El número de hojas y su forma condicionan mucho la calidad de las áreas desenfocadas. Sobre esto, hay que decir que el Canon EF-S 35mm f/2.8 proporciona un bonito bokeh.

4. Diseño y construcción

El anillo de enfoque carece de paradas duras y es estrecho. Además, su accionamiento resulta demasiado blando. Está claro que los ingenieros de Canon han considerado que el autoenfoque va a tener un uso predominante. La modalidad de enfoque se selecciona con un interruptor situado junto al de activación del estabilizador de imagen. El producto incluye la opción de enfoque manual a tiempo completo.

El objetivo está bien diseñado y construido. Su cubierta es de plástico y su montura de metal, sin el sellado climático que traen los modelos de gama alta. Su elemento más singular es, sin duda, el flash Macro Lite que incorpora en su parte frontal, cuyo funcionamiento se regula mediante un botón circular. Se trata de un aro con dos semicírculos leds independientes, que pueden activarse de forma conjunta o por separado. Asimismo, suministra dos niveles de brillo para un modelado más preciso de la luz. Su intensidad es suficiente para iluminar sujetos cercanos. Obviamente, no da el rendimiento de un flash anular externo ni brinda la misma potencia, sin embargo, es un extra muy práctico y, si sus prestaciones son suficientes para ti, te ahorras dinero y espacio en la mochila.

Flash macro del Canon EF-S 35mm f/2.8

Es una lente pequeña, como puedes ver en la imagen, y solo pesa 190 gramos. Utilizar objetivos tan ligeros siempre es una ventaja que notas mucho, especialmente, cuando estás más acostumbrado a los todoterrenos y, por supuesto, en reportajes largos. El diámetro de filtro de este Canon es de 49 mm, lo que supone un ahorro significativo a la hora de agregarle un filtro UV o algún polarizador. Este último tipo de filtro se puede acoplar sin problema, porque el enfoque es interno y el frontal no gira.

5. Enfoque

La unidad integra el mecanismo de autoenfoque STM de Canon. Es un motor paso a paso habitual en los productos de la serie EF-S. Aparte de tener una buena rapidez y precisión, es realmente silencioso. Gracias a esto último, es particularmente adecuado para la grabación de vídeos.

Las funcionalidades macro de este dispositivo representan un plus con respecto a su homólogo de Nikon. Presenta un destacado factor de ampliación de 1,0 x y una distancia de enfoque de solo 13 centímetros, de modo que puedes estar muy cerca del sujeto que quieres fotografiar.

6. Calidad gráfica

La óptica está estructurada con 10 elementos en 6 grupos. Incorpora un recubrimiento Super Spectra para mantener a raya los destellos y las imágenes fantasma.

La nitidez es una característica óptica especialmente cuidada. Alcanza su punto dulce en torno a f/8, mientras que a f/2.8 se mantiene a un buen nivel, especialmente en el centro. La difracción empieza a notarse a f/16 y a f/32 el resultado es deficiente. No recomiendo utilizar esta última apertura.

El viñeteado es contenido. Se aprecia, como era de esperar, a f/2.8. La caída de la luz en las esquinas disminuye bastante al cerrar a f/3.5 y es ya imperceptible a una apertura de f/5.6.

A 35 mm no se dan los problemas de distorsión que presentan, en mayor o menor medida, los grandes angulares. En este caso, lo que hay es una pequeña deformación de barril, poco importante. En cuanto a las aberraciones cromáticas, señalar que están bastante controladas. Con la aplicación del perfil de la lente en la edición de las imágenes, estos defectos o bien se eliminan por completo, como la distorsión, o se aminoran.

7. Accesorios

En la caja viene con un parasol circular, un extra que no incluyen todas las unidades de Canon. A modo de apunte, comentar que el parasol, denominado ES-27, no permite emplear el flash macro.

Parasol Canon ES-27

Características

  • Dimensiones: 6,9 x 5,5 cm.
  • Diámetro de filtro: 49 mm.
  • Peso: 190 g.
  • Montura: EF-S.
  • Distancia focal: 35 mm.
  • Apertura máxima: f/2.8.
  • Apertura mínima: f/32.
  • Láminas del diafragma: 7.
  • Estabilizador de imagen: sí (4 pasos).
  • Construcción del objetivo (elementos/grupos): 10/6.
  • Ángulo de visión (horizontal, vertical, diagonal): 35°55′, 24°20′, 42°35′.
  • Motor para el autoenfoque: STM.
  • Distancia mínima de enfoque: 0,13 m.
  • Ampliación máxima: 1,00 x.

Compatibilidades

Es compatible con las cámaras Canon EOS con sensores APS-C. Si tienes una cámara de la serie EOS M necesitas un adaptador EF-EOS M.

Opinión final

4,5 estrellas

Tengo que reconocer que este objetivo me ha sorprendido bastante, en buena medida, por la singularidad que le aporta su innovador anillo de iluminación led. Le encuentro la misma pega que le pusimos al Canon EF-S 24mm f/2.8, debida a su estrecho anillo de enfoque. Si vas a utilizar el autoenfoque no es un problema, pero si eres más de usar el enfoque manual es un inconveniente que debes considerar.

Entre sus ventajas hay que destacar la luminosidad que aporta, gracias a su mecanismo para reducir la trepidación, de 4 pasos, y a una notable apertura máxima de f/2.8. Además, su compacidad y reducido peso lo convierten en una herramienta muy manejable, y marca las diferencias por la versatilidad adicional que le deparan sus funcionalidades macro, acrecentadas por su flash anular integrado.