Algo común a estos objetivos es que las distintas marcas suelen echar el resto en su fabricación. Emplean sus mejores recursos, tanto para la construcción como para la óptica. Otra característica habitual de los 24-70 mm es su alta luminosidad. Así es que, entre unas cosas y otras, no son nada económicos, aunque dada su versatilidad resultan más fáciles de amortizar que las lentes para usos específicos.
¿Para qué sirven los 24-70 mm?
Estos objetivos ofrecen un rango medio, no demasiado holgado, pero más que interesante. A 24 mm tienes un gran angular y a 70 mm un teleobjetivo corto. Te dan un óptimo equilibrio entre cobertura focal y calidad gráfica, de ahí su popularidad. Los modelos con más zoom son propensos a tener mayores aberraciones y a que se resienta su nitidez, especialmente en el extremo largo o en su máxima apertura.
1. Fotoperiodismo y reportajes sociales
Este tipo de lente está muy ligada a ámbitos profesionales, ya sea fotoperiodismo o eventos sociales. Un 24-70 mm te da la suficiente versatilidad, por ejemplo, para cubrir un reportaje de bodas. En una ceremonia necesitas un buen ángulo y también es básico el zoom, porque, aunque siempre vas a estar bastante cerca de los novios, el protocolo exige mantener una cierta distancia en determinados momentos.
2. Competiciones deportivas
En modalidades deportivas es particularmente útil en interiores. La apertura típica de estos objetivos es de f/2.8, de modo que aportan una buena luminosidad, que es necesaria para competiciones donde no puedes utilizar el flash. Es el caso de partidos de baloncesto o de voleibol. Si estás a pie de pista, normalmente se combina con un teleobjetivo de 70-200 mm, que te permite obtener imágenes más detalladas de lo que está sucediendo.
3. Retratos
El mejor rendimiento en retratos se alcanza en la posición de teleobjetivo. A 70 mm, con la lente abierta de par en par, es donde se consigue el mejor bokeh. Se trata de una distancia, eso sí, en la que algunos modelos bajan algo la nitidez, sobre todo en los bordes. En retratos, sin embargo, no es tan preocupante -como en otras modalidades- que pueda disminuir un poco.
Los productos de primeras marcas y los Tamron o Sigma brindan buenos desenfoques. Pese a que no son tan impresionantes como los que te da una lente fija, tienes como contraprestación un zoom para variar rápidamente el encuadre.
4. Modalidades adicionales
En paisajes y arquitectura tampoco va nada mal, en particular para tomas con poca luz ambiental o en interiores de edificios, dada su luminosidad. A 24 mm, eso sí, puede que a veces eches en falta el campo de visión más amplio que ofrece un súper gran angular. A fin de cuentas, un 24-70 mm es un todoterreno y las fotos arquitectónicas o de paisajes no figuran entre sus usos principales, sino adicionales.

Canon EOS 6D Mark II | 24 mm, f/7.1, 1/160, ISO 500
También es posible emplearlo para fotografía de producto y, puntualmente, para capturar alguna imagen macro. Estos objetivos no están destinados a macrofotografía, pero tienen en común que permiten una buena distancia mínima de enfoque y tampoco suelen ir mal en cuanto a aumento máximo. De todas formas, si quieres algo realmente bueno, siempre debes apostar por productos específicos.
5. Un buen compañero de viaje
Es muy buena opción para llevar de viaje, con la única salvedad de que estas lentes no suelen ser ligeras. Los fabricantes se esmeran mucho, utilizando buenos materiales, sellados climáticos y ópticas bastante complejas. Y esto repercute en unos pesos considerables, en algunos casos incluso superiores a 1 kilo.
Aun así y todo, un 24-70 mm es una de las opciones ideales para un viaje, en especial si solo piensas llevar uno o dos objetivos. La calidad en fotografía, quieras que no, normalmente va ligada al peso.
Comparativa
Los 24-70 mm de las principales marcas no solo tienen la misma apertura máxima, sino unas características muy similares, como se refleja en la siguiente tabla. La lente de Sony es para cámaras sin espejo.
Canon EF 24-70mm f/2.8L II USM |
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![]() |
8,8 x 11,3 cm |
Ø 82 mm |
805 g |
Full frame |
f/2.8 |
f/22 |
9 láminas |
No estabilizado |
18 elementos 13 grupos |
0,38 m |
0,21 x |
Sellado |
Con parasol y funda |
![]() |
Ver Precio |
Nikon AF-S 24-70mm f/2.8E ED VR |
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![]() |
8,8 x 15,4 cm |
Ø 82 mm |
1.070 g |
Full frame |
f/2.8 |
f/22 |
9 láminas |
Estabilizado (4 pasos) |
20 elementos 16 grupos |
0,38 m |
0,28 x |
Sellado |
Con parasol y funda |
![]() |
Ver Precio |
Sigma 24-70mm F2.8 DG OS Art |
---|
![]() |
8,8 x 10,7 cm |
Ø 82 mm |
1.020 g |
Full frame |
f/2.8 |
f/22 |
9 láminas |
Estabilizado (4 pasos) |
19 elementos 14 grupos |
0,37 m |
0,21 x |
Sellado |
Con parasol y funda |
![]() |
Ver Precio |
Sony FE 24-70mm F2.8 GM |
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![]() |
8,8 x 13,6 cm |
Ø 82 mm |
886 g |
Full frame (evil) |
f/2.8 |
f/22 |
9 láminas |
No estabilizado |
18 elementos 13 grupos |
0,38 m |
0,24 x |
Sellado |
Con parasol y funda |
![]() |
Ver Precio |
Tamron SP 24-70mm F/2.8 Di VC G2 |
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![]() |
8,8 x 11,1 cm |
Ø 82 mm |
905 g |
Full frame |
f/2.8 |
f/22 |
9 láminas |
Estabilizado (5 pasos) |
17 elementos 12 grupos |
0,38 m |
0,20 x |
Sellado |
Con parasol y funda |
![]() |
Ver Precio |